Publicado por Jokin Garate
Saliendo de Valdizarbe, pasamos por Berriozar, yéndonos todos ufanos con destino hacia el Baztan.
Y nos pusimos a andar desde Erratzu hacia la cima de una montaña cañera, donde se fabrica el viento sabiendo que con tal fuerza, llegará a cualquier lugar.
Buscando hadas y oro, sólo encontramos riqueza en la siempre bella huella de la madre naturaleza, que nos hizo despertar.
Arboles aún desnudos, charcos de nieve esparcidos, y una temperatura aviesa que no puede ya negar la cercana primavera.
Nos quedaba por vivir una experiencia salvaje: la pugna que el agua ejerce para poderse escapar, de unos cauces indelebles que no la pueden dominar.
Gracias a Jokin Infiesta por lo bien que midió y organizó la salida. Gracias también a Jesús Delgado Garatea, por las bellas imágenes que aquí quedan expuestas.
Las fotografías
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